Aitor Guitarte, editor del blog Somos Medicina, nos ofrece una reflexión a tenor del estudio SPORT.
Lurie JD,
Spratt KF, Blood EA, Tosteson TD, Tosteson AN, Weinstein JN. Effects of
viewing an evidence-based video decision aid on patients' treatment
preferences for spine surgery. Spine, 2011 Aug 15;36(18):1501-4.
Se ha llevado a cabo un gran ensayo clínico (SPORT)
en Estados Unidos sobre el tratamiento del dolor lumbar causado por
hernia discal, estenosis del canal o patología degenerativa. Pero más
allá del ensayo en sí, lo que a nosotros nos llama la atención es el
método que están usando para informar a los pacientes, el consentimiento
informado en vídeo. La idea es simple, atajar los sesgos derivados del
informador durante la entrevista para que los pacientes elijan una u
otra vía sin verse condicionados por el médico.
No es sólo una
interesante idea que podría ser aplicable sin mucho coste en nuestros
sistemas sanitarios, es además una nueva vía de estudio en cuanto al uso
de nuevas tecnologías en Sanidad. Y precisamente esto han empezado a
hacer como parte de un análisis secundario de los datos del ensayo
SPORT. El objetivo del estudio ha sido evaluar el impacto del vídeo que
se utiliza en el ensayo SPORT. Este vídeo presenta datos basados en
evidencia a todos los participantes en el estudio, como parte del
proceso de consentimiento informado.
De los 2151 voluntarios que
vieron el vídeo (86%) aproximadamente un tercio cambió su opinión,
bastantes más que los del grupo que decidió no ver el vídeo. Pero aquí
viene lo interesante, entre los 806 pacientes que cambiaron de idea tras
ver el vídeo no hubo un posicionamiento claro ya que el 55% se decidió
por la cirugía y el 45% restante por las opciones menos agresivas. Del
mismo modo, de los 617 pacientes que no tenían una opinión definida al
entrar en el estudio el 27 y el 22 por ciento respectivamente se
decidieron por la cirugía y el tratamiento no quirúrgico. Y además,
quienes vieron el vídeo y no cambiaron de opinión reforzaron su punto de
vista más que quienes mantuvieron su decisión pero sin haber visto el
vídeo
Por lo tanto, el vídeo cumplió dos objetivos claros
fortalecer la opinión de quienes se mantuvieron en su idea original, y
al mismo tiempo provocar una mayor tasa de cambio en las decisiones. Y
lo más importante, sin alterar significativamente la balanza hacia uno u
otro lado.
Más allá del estudio y sus conclusiones, lo que parece
evidente es que el paciente involucrado en las decisiones sobre su
salud, necesita vías de información fiables que mejoren sus
conocimientos ayudandole a crear expectativas realistas.
Las
ayudas a las decisiones basadas en la evidencia sin sesgos, como estas,
pueden ser herramientas útiles para ayudar a los pacientes a participar
en las decisiones sobre su salud y a convertirse en pacientes
involucrados
Gracias por la cita, empiezo a seguiros en twitter
ResponderEliminar